Tan sólo pido
que la vida me otorgue ese milagro.
En este día gris en que te siento
tan lejana cual si entre nosotros
mediase el manto acuoso de un océano
o la arena infinita de un desierto
sólo pido que llegue
el día del perdón o del olvido,
el día en que estas calles
que hoy dolorosamente nos separan
converjan en un punto,
en una plaza azul donde resulte
posible un nuevo encuentro
donde no sean precisas las palabras.
Sólo pido a la vida
que ese día amanezca:
Que te vuelva a encontrar
y de la nada crezca una mirada,
un puente que nos lleve hacia la aurora.
De Por si mañana no amanece
Hermoso, dolorido, conmovedor poema. Ojalá la flecha dé en el blanco. Afectuosamente.
ResponderEliminarOlga Liliana Reinoso
Afortunada la destinataria de estos versos. Espero que tu búsqueda o tu espera resulten fructíferas y vuelvas a encontrar. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias, amigas. Con vuestra palabra, la espera será menos larga y la esperanza más poderosa. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias por compartir este sentido poema, querido Sergio.
ResponderEliminarMe agradó leerlo, percibo nostalgia, una tristeza suave en una cadencia envolvente. Y la esperanza presente, un buen final.
Me gusta este blog, Sergio, los colores son muy especiales.
Mi abrazo y mi cariño
Analía
Gracias a ti, Analía. Por tu presencia y tus amables palabras. Un placer verte por estos desiertos virtuales y estos oasis soñados. Un abrazo.
ResponderEliminarEstos reencuentros sólo se suelen dar en los poemas - pero en fin, para eso están!
ResponderEliminarCierto, José Ángel, en los poemas y en los sueños (benditos territorios, entonces!). Gracias por tu presencia. Un abrazo.
ResponderEliminarhermoso y sentido poema !!!
ResponderEliminarViejo amigo: Me atrevo a interpretar en tu poema un ferviente deseo, no ya de reencontrar a la persona, sino de recuperar esos instantes que hicieron del mundo un lugar mágico. Bien: Quiero decirte que eso no es imposible, y que aunque las personas ya no persistan más que en el recuerdo, las sensaciones pueden regresar, porque el mundo es extraordinariamente grande y debemos rendir culto a la esperanza. Un abrazo. SWJ.
ResponderEliminarCLAUDIA: Muchas gracias por tu visita.
ResponderEliminarMY BRO: Tiempo sin saber de ti. Como siempre, muy valioso tu filosófico y siempre sabio punto de vista.
Un abrazo a ambos y gracias por vuestra presencia, que me resulta muy grata.
Recuerda, hermano, que la vida es sucesiva. Que el pasado existe, pero en ese otro tiempo irrecuperable. NO, no te digo que olvides, porque el olvido, tú mismo lo dijiste, "es patrimonio de los seres desalmados". Pero el Horizonte es amplio y el minuto que vendrá aún está por inventarse. VIVE. Y escríbeme, ya sabes la dirección, aunque ahora es gmail. Yo estoy, como siempre, cerca del fin, pero ¿quién no lo está? Un abrazo. SWJ.
ResponderEliminarMe váis a perdonar tú, Sergio, y tu amigo el filósofo, pero una mujer que no ha sabido valorarte, lo único que merece es el olvido. No sé si esto puede molestarte. Si es así, lo siento, pero es mi opinión y siento que es mi deber expresarla. Un abrazo.
ResponderEliminarTe estoy escribiendo, compañero. Espero te llegue tanto el mensaje como mi amistad aunque medie la distancia, este distancia extraña que apenas comprendemos.
ResponderEliminarMAYTE: No molestas en absoluto. Por el contrario, agradezco tu punto de vista, y lo valoro, aunque ahora mismo no pueda compartirlo por razones obvias. Gracias y un abrazo.
Tu poema me ha emocionado hasta las lágrimas. Muchas gracias, Sergio, y que Dios te bendiga.
ResponderEliminarGracias por tu visita, Carmen.
ResponderEliminarMe alegra tu emoción, pero no tus lágrimas. Te debo una sonrisa.
Gracias por sembrar tu palabra en estos desiertos y un abrazo.